¿Un cambio definitivo?: Qué pasará con el éxodo desde los grandes centros urbanos y el interés por los barrios privados cuando termine la pandemia

Por José Luís Cierri | Infobae

El actual descenso de casos de Covid empieza a ilusionar a protagonistas de distintos rubros productivos que imaginan una especie de día después de la pandemia.

La pregunta surge entre quienes desarrollan y comercializan lotes y propiedades en urbanizaciones cerradas: ¿Qué pasaría entonces? ¿Cuál sería su impacto en los barrios privados?

Hay varias dudas. Muchos se mudaron alejándose de los grandes centros urbanos de Buenos Aires y el Gran Buenos Aires (GBA) para evitar aglomeraciones, dejaron sus departamentos y se instalaron cerca del verde y lo natural. Pero el ida y vuelta y la congestión en las rutas, en particularmente en las horas picos, son factores a considerar, en especial por quienes viajan seguido. Quienes tele-trabajan no tienen esa contraindicación, pero pueden tener otras.

Alejandro Mazzei, director de Mazzei Propiedades, dijo a Infobae que si finaliza la pandemia, el escenario no cambiará. “Muchas familias ya querían el cambio de vida. Sobre todo por la seguridad que ofrecen este tipo de urbanizaciones, en especial para aquellos que se encuentran en el GBA. Por consiguiente, creemos que la tendencia seguirá, aunque quizás no de manera explosiva como durante la pandemia”.

Desde el sector sostienen que quienes se han podido reubicar en espacios más abiertos cerca de lugares que brindan actividades deportivas y al aire libre difícilmente vuelven a la Ciudad, priorizando este estilo de vida a pesar del tiempo del viaje a sus trabajos presenciales.

“Muchas familias ya querían el cambio de vida y seguridad. Por consiguiente, creemos que la tendencia de vivir en los barrios privados seguirá aunque quizás no de manera explosiva como durante la pandemia” (Mazzei)
“Hay gente que tuvo algunos altercados en esta búsqueda de tranquilidad y verde, porque en el último tiempo debieron retornar en forma presencial o sus hijos volver a la escuela, pero es un porcentaje mínimo. Realmente quien elige un cambio y debe volver a la ciudad está dispuesta a combinar los dos mundos”, amplió Mazzei.

En Bell Barri, ubicado en Canning, lanzado hace poco conservan valores en lotes desde USD 55.000 en donde se puede construir y el interés no bajó. Además, la alternativa de terrenos de 600 metros cuadrados con una casa de 100 m2 cubiertos + 20 m2 semicubiertos y piscina puede encontrarse en 139.000 dólares.

Expansión en ventas

Fuentes consultadas sostienen que la pandemia generó un cambio importante de la mentalidad al elegir una vivienda y su ubicación. El concepto abierto ganó en la integración de ambientes y la cocina debe ser de buen metraje.

Luis Eduardo Signoris, gerente General de CGF la compañía que opera y desarrolla Lagoon Pilar, dijo a Infobae que “la gente disfruta de su hogar y prioriza la comodidad ante todo. Se destaca el incremento en la venta de lotes por arriba del 200% respectos de la pre pandemia, en segundo lugar de condominios y por último las casas, como también el incremento de alquileres temporales en los meses de verano”.

Expertos perciben que la mayoría de los nuevos vecinos que eligieron distintas urbanizaciones lograron adaptarse satisfactoriamente a la nueva modalidad, lo que generó e incrementó un gran cambio tecnológico que se venía dando lentamente, la modalidad de trabajo fue mutando, lo que permite permanecer en las viviendas en las zonas elegidas.

“Se vislumbró la gran capacidad de adaptación que tenemos y que toda crisis trae un cambio importante para mayor crecimiento y evolución, resignificando y priorizando la calidad y modo de vida más natural, al aire libre y con más actividades deportivas”, añadió Signoris.

En Lagoon Pilar una casa tipo familiar para dos adultos y dos hijos ronda entre USD 220.000 y 270.000 sobre una superficie promedio de 600/700 m2 de lote y 220 m2 cubiertos. Con living-comedor, cocina-comedor diario, lavadero, toilette de recepción, dependencia de servicio, una planta alta de 3 dormitorios, con dos baños, uno en suite + vestidor.

Allí hay unidades de 1, 2, 3 y 4 ambientes en condominio con terrazas privadas, parrilla y las plantas bajas con su jardín. Sus valores oscilan entre 65.000 y los 220.000 dólares.

También en el partido de la zona norte que más urbanizaciones posee en su trazado, en Pilar Golf Club las ventas se cuadriplicaron al tomar años pre pandémicos y recesivos.

Con el lanzamiento del nuevo barrio Pebble Beach, la demanda se concentró en lotes, “vimos un fuerte movimiento tanto de alquiler como compra, en nuestro desarrollo de residencias. La consolidación de lugares como Tigre o Pilar, se había logrado aún antes de 2019. Si bien hubo una nueva y fuerte migración hacia los suburbios, estas plazas por citar algunas, mantienen la actividad inmobiliaria con el propio flujo de público que se va moviendo dentro de la zona. Es común hacer operaciones con hijos o padres que se van agrandando o achicando en metros cuadrados”, destacó a Infobae Mauro Misuraca, presidente de Pilar Golf Club.

Con valores aún bajos en los costos de construcción (promediando los USD 650), la demanda de lotes de calidad se mantiene firme y el ritmo de obras a buen nivel. Los valores de los lotes van desde los USD 130.000 con financiación propia.

Por su lado, a la altura del km 56 del ramal Pilar de la Panamericana, Grupo Coria lleva adelante Cañada Village y Altos de la Cañada.

Daniela Pérez de Graffe, directora comercial de esta desarrolladora, comentó a Infobae lo siguiente: “Se registró un repunte de ventas a partir de febrero, que se viene afianzando con el inicio de las clases y la mudanza de muchas familias al Norte que priorizan vivir cerca de centros de estudio, incluso para quienes arrancan en las universidades de la zona”.

En Altos de la Cañada las unidades de 2 ambientes parten desde USD 69.000, y las de 3 ambientes con jardín, desde 92.700 dólares. En Cañada Village, las de 2 ambientes arrancan en USD 61.000, y las de 3 ambientes, desde 83.500 dólares.

Sobre si la nueva normalidad implicaría la vuelta a la ciudad de muchas personas que eligieron el verde, Pérez de Graffe amplió que “las personas quizás viajarán a la ciudad el día que les toque ir a trabajar presencial, pero no creo que prescindan nuevamente la calidad de vida tanto para ellos como los chicos y en general la familia, de tener la plaza, áreas recreativas cerca, piletas, parrilla en su departamento con la posibilidad de juntarse con amigos y hacer un asado en cualquier momento”.

Trabajo remoto

La pandemia hizo que la demanda busque un lugar donde puedan vivir, trabajar y disfrutar la casa a la vez. Tales conceptos de calidad de vida ganaron más sentido y vienen impactando directamente en la construcción.

El principal ejemplo, es Bosque Tortugas, que cambió completamente su propuesta de viviendas durante la pandemia, con balcones terraza que permiten que el bosque esté a pasos de casa. Y que, además de todos los amenities, cuenta con oficinas individuales y un coworking central. Las primeras unidades tienen un valor promocional de USD 1.800 por m2.

“Hay un componente de la nueva normalidad que es el trabajo remoto, que en un porcentaje alto demostró eficiencia en muchos casos en donde las empresas eligen achicar la estructura, bajando costos fijos y al mismo tiempo tener el mismo resultado. Es por eso que creo que no necesariamente la nueva normalidad implica volver a la ciudad”, comentó a Infobae Hernán Nucifora, CEO de Global Investments.

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