Qué variables analizar para desarrollar en 2021
Por Inés Álvarez
Referentes del sector cuentan por qué conviene orientarse a la clase media-alta y aconsejan sobre cómo pensar negocios estables.
Mientras la pandemia siga siendo la principal preocupación de la humanidad, la crisis económica no dejará de profundizarse. Aunque sabemos que las consecuencias serán nefastas, todavía no podemos dimensionar hasta qué punto el Covid-19 golpeará a las distintas actividades ni con qué recursos contaremos para levantarnos el día de mañana.
Sin embargo, la contadora Mariela Schenone, Directora de CDS Desarrollos Inmobiliarios y MetroX Real Estate, pensó en una serie de puntos a tener en cuenta para, aun con un panorama incierto, llevar adelante un negocio inmobiliario.
Según Schenone, hoy los empresarios tienen la oportunidad de satisfacer el déficit habitacional de la clase media repensando el concepto de `localización`. Con la aparición del coronavirus cada vez más empresas aceptan que sus empleados trabajen desde sus casas, de modo que es posible que familias menos pudientes se instalen en zonas suburbanas, donde la incidencia de la tierra es menor. El licenciado Ezequiel Chomer agrega: `Por lo que hemos constatado este año, buena parte del sector más adinerado de la sociedad tiene cierto hartazgo del país, y tiene poco apetito por comprar mucho más, así que más que comprar busca vender. Pero hay otro grupo muy importante, en sectores medios y altos, que es consciente de la baja del mercado y no quiere perderse la oportunidad de entrar hoy en algo que en otro momento jamás podría haber accedido`.
Para Schenone, otra variable es la financiación a mediano y largo plazo, para lo cual es imprescindible el impulso del sector privado. Al respecto, la especialista identifica tres esquemas entre los cuales los desarrolladores pueden optar: `El financiamiento colectivo, el financiamiento escalonado a mediano y largo plazo y de financiamiento mixto, entre inversores y consumidores finales`.
El surgimiento de nuevas áreas para desarrollar podría favorecer un cambio en la manera de entender a la moneda. Schenone sostiene: ` Este mercado planifica, presupuesta e idea negocios en dólares. En los proyectos del interior la adaptación viene siendo más rápida y ya no se discute prácticamente, se negocia en pesos con esquemas de ajustes asociadas a variables del mercado. El dólar es sólo una variable comparativa. En Buenos Aires, en cambio, aún es más difícil la discusión y la clave está en las incidencias de los terrenos y que su moneda de pago sigue fuertemente ligada al dólar. Quizá el cambio de localizaciones, sumado a otros factores, permita arribar a algún esquema más pesificado, al menos para el segmento de mercado de viviendas para sectores medios y medios bajos`.
Por último, Hernán Nucifora, CEO de Global Investements, sintetiza lo que considera lo más elemental para lograr un negocio de éxito: `Creo que se debe poner foco en la diferenciación, en su máxima expresión. Ser diferentes y agregar valor. Si hacés más de lo mismo, va a haber más oferta de lo mismo. En cambio, si hacés productos diferenciados con mucha ingeniería de valor, el mercado va a saber apreciarlo. Ya sea a través de una financiación especial, un producto en particular o de la sustentabilidad`. Para esto, los desarrolladores deben estar atentos a las necesidades que están surgiendo en este período y a las actividades que se ven menos perjudicadas por la pandemia.